La mesa es uno de los elementos decorativos más fundamentales que tenemos en nuestras casas. No siempre podemos aventurarnos a decir que un mismo mueble puede adaptarse a cualquier habitación de nuestra casa, ni que es uno de los elementos decorativos más importantes en cada sala. La elección de cualquier mesa depende del lugar en el que la situemos y a la actividad a la que la destinemos. Por ejemplo, una mesa de cocina, cumple la función de recibir a los miembros de la familia en sus desayunos y algunas de sus comidas diarias. Mientras que una mesa de salón, cumple un papel más decorativo y especial, esta mesa recibirá reuniones más grandes y señoriales o quizá la utilicemos como comedor habitual.
Nos encanta la aplicación de las mesas en decoración y sobre todo las sensaciones que son capaces de aportar a nuestros espacios. En este post hablaremos especialmente de las mesas redondas y os explicaremos por qué son nuestras favoritas. ¡Comencemos!
¿Por qué elegir una mesa redonda?
Mucha gente tiene la concepción de que las mesas redondas desaprovechan el espacio, no pueden evitar preguntarse ¿por qué colocar una mesa en la que sólo pueden sentarse cuatro personas? En cambio, para los que practican el Feng Shui, las mesas redondas crean un buen chi o energía positiva, ya que no siguen líneas rectas y aportan una sensación de unidad. Si todavía no estáis muy convencidos, estas son algunas de las razones por las que a nosotros nos privan las mesas redondas.
1. Las mesas redondas, especialmente las que se apoyan en una sola pata, ofrecen una imagen visual mucho más ligera de nuestros espacios. Desde un pensamiento oriental, simbolizan el crecimiento de la familia y dan buena suerte. Además, por fin se acabaron los problemas de sentarse delante de la pata.
2. Eliminan las líneas rectas y las esquinas, aportando armonía y ligereza al espacio. Un buena mesa redonda situada junto a la pared puede aligerar la sensación espacial eliminando las líneas líneas duras y rectas de nuestras salas.
3. Aportan sensación de amplitud y suavizan la sensación espacial. Una mesa con el tablero de cristal hará más grandes las estancias y una mesa redonda colocada como separación de estancias, hará que el paso de una sala a otra sea visualmente más fluido.
4. Ocupan, o mejor dicho, restan menos espacio. Efectivamente la mesa, es uno de los elementos más importantes en nuestros salones, pero no por ello deben ocuparlos por completo. Para que esto no ocurra, es cuestión de dividir el espacio teniendo en cuenta nuestras medidas y la capacidad de comensales que deseamos para nuestra mesa. En situaciones generales, en una mesa redonda de aproximadamente 1 metro de diámetro pueden caber de cuatro a seis comensales. Jugando con las formas y las redondeces, podréis gozar de esa estupenda sensación de amplitud en vuestro salón y lo que es mejor, ¡dispondréis de más espacio para decorar!
¿Por qué no? ¡Mesas redondas para el comedor!
En nuestros salones, uno de los elementos más importantes de la decoración es la mesa. De ella depende toda la estética del espacio, la funcionalidad y la comodidad del comedor. Por ello, es esencial elegir mesas cómodas y a nuestro gusto.
Cómo hemos dicho anteriormente, las mesas redondas consiguen economizar al máximo el espacio de nuestros ambientes. Existen todo tipo de diseños, adaptables a nuestros gustos y al estilo de nuestro salón; además, si nos martiriza la idea de “esta mesa es demasiado pequeña”, existen mesas redondas extensibles e incluso con un diámetro mayor, para espacios más grandes o para familias numerosas.
Las mesas redondas cuentan con un encanto y fuerza del que no disponen las mesas rectangulares, son especialistas en crear ambientes acogedores y confortables, así como espacios amplios, ligeros y encantadores. La elección de un conjunto de sillas adecuado a la mesa, le dará personalidad al diseño de nuestros comedores y podrá complementarse con otro tipo de accesorios, como manteles vistosos o lámparas colgantes.
¿Qué os parece, apostamos por las mesas redondas?