Uno de los detalles a tener en cuenta a la hora de aportar personalidad a nuestro establecimiento de hostelería es la consecución de un estilo unitario que lo caracterice, distinguiéndolo claramente de la competencia y amoldándose al enfoque culinario que queremos dar al negocio. Aquí te ofrecemos 5 estilos que pueden inspirarte:
Clásico
El estilo retro es uno de los clásicos conocidos por todos. Se trata de dar a la sala un toque de otra época, equipándola con mobiliario que se remonte a la misma y decorándola con retratos de personajes conocidos o acontecimientos célebres que tuvieron lugar en la misma. Los restaurantes rockabillies son un buen ejemplo de este estilo decorativo.
Industrial
Otro estilo decorativo en auge es el industrial, que consiste en decorar nuestro establecimiento con elementos industriales y materiales nobles, como el hierro o la madera, tratados de manera natural. En este estilo es muy significativo que el mobiliario para hostelería sea artesano y muestre sus imperfecciones como algo bello.
Temático
Cabe considerar a los restaurantes temáticos como un estilo particular, que abarca un sinfín de estilos, en la decoración de establecimientos de hostelería. Consiste en decorar nuestro establecimiento centrándonos en un tema, que sugiere tanto un tipo de comida como una forma de vida singular o exótica. Los restaurantes de estilo mexicano, italiano o los pubs de estilo irlandés son un buen ejemplo.
Rústico
Un estilo decorativo muy popular actualmente es el rústico, el cual consiste en decorar la sala con motivos de épocas pasadas, principalmente rurales, que recuerden la vida de entonces y la comida tradicional de la zona.
Minimalista
El estilo minimalista, de inspiración oriental, es también muy habitual en los restaurantes que ofrecen este tipo de comida. Consiste en hacer de la austeridad en el mobiliario y la ausencia de artificios algo elegante y sofisticado.
El estilo de tu negocio de hostelería es fundamental a todas luces, por cuanto que de él dependen en buena medida tanto la elección inicial como la impresión que cause la primera toma de contacto en el cliente. De lo dicho se sigue la importancia de proveernos siempre de un mobiliario de hostelería de calidad y que sirva para los fines que hemos descrito.